¿Sabes qué es la falsa miopía?

Tiene síntomas muy similares, pero no es miopía, y a veces, se puede confundir al hacer el diagnóstico. En este post queremos contarte qué es la pseudomiopía, o la falsa miopía, cuáles son las señales para detectarla y cómo se puede diferenciar de la verdadera miopía.

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Hablemos primero de acomodación

Para entender la miopía y la falsa miopía, hay que hablar primero de qué es la acomodación, y esta es la capacidad que tiene el ojo para aumentar o restar la potencia de todo el sistema óptico y ser capaz así de enfocar y ver con nitidez los objetos a cualquier distancia.

Un ojo con una visión perfecta, que no necesita ninguna corrección, tiene la potencia exacta para que ese enfoque sea el adecuado y ver bien objetos lejanos, y a continuación, ser capaz de ver también correctamente los más cercanos al regularse la potencia gracias al proceso de acomodación.

¿Qué es la falsa miopía?

La falsa miopía es un trastorno ocular que afecta a la acomodación del ojo. En concreto, lo que ocurre es que, al intentar enfocar objetos a cierta distancia, el ojo aplica demasiada potencia y los percibe borrosos. Es como si el ojo perdiera esa capacidad de adaptación para regular la potencia necesaria en cada momento.

 

 Síntomas de la pseudomiopía

 Esto es lo que puedes notar si tienes falsa miopía:

  • Mala visión de lejos.
  • Molestias y problemas de enfoque al ver de lejos y luego de cerca, y al revés.
  • Dolor de cabeza, mareos y fatiga visual.

 

¿En qué se diferencia de la miopía?

La miopía es una patología ocular que se produce porque la luz se enfoca delante de la retina, en vez de hacerlo en su superficie por ser el globo ocular demasiado largo, o bien porque el cristalino, la córnea, o ambos, presentan una curvatura demasiado pronunciada. Por tanto, podemos decir que la miopía está causada por la forma del ojo, mientras que la pseudomiopía se debe a un problema de funcionamiento del ojo.

 

 ¿Cómo se diferencia la falsa miopía de la miopía convencional?

 Aunque la causa de ambas alteraciones es muy diferente, ambas tienen el mismo síntoma principal; no enfocar correctamente de lejos. Esto hace que distinguirlas sea muy complicado, pues el refractómetro, el equipo utilizado para detectar la potencia del ojo de los pacientes cuando se realizan una revisión visual, solo distingue si hay más o menos, pero no qué causa esta variación.

Ante la dificultad para detectar la falsa miopía, los ópticos-optometristas expertos, como los de +Visión, toman como referencia la evolución en la graduación; en una miopía tradicional, es normal que a lo largo de los años haya cierto aumento progresivo de dioptrías, sin embargo, cuando la graduación varía en un corto periodo de tiempo, tendiendo a reducirse, podría tratarse de un caso de falsa miopía.

¿Cómo se corrige?

Usar gafas o lentillas para mejorar la visión de lejos es una de las soluciones, pero también existe la posibilidad de realizar una terapia visual mediante ejercicios para devolver al ojo su capacidad de acomodación natural y poder ver con nitidez de lejos y de cerca.

 

Si sospechas que podrías tener miopía o falsa miopía porque no ves bien de lejos, pide cita online o pásate por tu óptica +Visión más cercana para que uno de nuestros especialistas pueda realizarte un examen visual y descubrir qué alteración visual necesitas corregir.