¿Tus ojos rechazan las lentillas?

Las lentes de contacto proporcionan grandes beneficios a quienes las usan, pero en algunos casos puede darse un rechazo. A continuación, te contamos cómo saber si tus ojos están rechazando las lentillas y qué debes hacer si esto sucede.

0

Apostando por las lentes de contacto

Las personas que deciden corregir sus alteraciones visuales con lentillas lo hacen porque quieren disfrutar de las siguientes ventajas:

  • Libertad de movimiento para realizar cualquier deporte o actividad física.
  • A nivel estético, no supone ningún cambio de apariencia como sí lo es empezar a llevar gafas y acostumbrarse a verse con ellas.
  • Y en cuanto al nivel de visión, las lentes de contacto proporcionan un campo más amplio que las gafas y una mayor nitidez.

Síntomas de rechazo

Pese a que la gran mayoría de usuarios de lentillas disfrutan de ellas sin experimentar ninguna complicación, algunas personas sí notan algunas molestias en las primeras semanas de uso. Estos son los principales síntomas de rechazo:

  • Incomodidad. Si pasan las horas y tienes una sensación de incomodidad continuada y te es imposible olvidar que llevas las lentillas puestas porque te molestan, es posible que no estés utilizando las lentes más adecuadas para ti y haya un problema de ajuste.
  • Sequedad. Este síntoma está relacionado con el punto anterior, pues si la lentilla reseca tus ojos y no mantiene la hidratación adecuada, la incomodidad aumenta.
  • Dolor, ojos enrojecidos y secreciones. Si tienes los ojos rojos, te escuecen, e incluso notas que segregan alguna sustancia, lo mejor es que dejes de usar las lentes de contacto inmediatamente, pues estas son señales claras de la presencia de una infección.

Cómo evitar el rechazo de tus lentillas

La solución para el rechazo de las lentillas dependerá de cuál haya sido la causa que lo origine:

  • Si las molestias se deben a un problema de ajuste, debes consultar con tu óptico-optometrista experto en contactología para que lo confirme y dé con las lentes correctas para tu alteración visual y para tus ojos.
  • Si tus lentillas te producen sequedad ocular, la forma de contrarrestarlo es usando gotas específicas para este problema que te ayuden a hidratarlos. Este producto debe ser compatible con el material del que están fabricadas las lentes de contacto, por lo tanto, es importante que uses el que te recomiende un profesional.
  • Si has sufrido una infección ocular, es probable que se deba a un uso incorrecto de las lentillas o a una mala limpieza. El mantenimiento de las lentes de contacto es fundamental para una buena salud visual que te permita aprovechar todas las ventajas que proporcionan. La higiene es la clave para que tus lentillas duren más y en mejores condiciones, y a la vez, evitar infecciones. En este post te contamos todo lo que tienes que saber para limpiarlas correctamente, y en este otro te hablamos de los líquidos y productos específicos para lentes de contacto.

 

Si notas algún síntoma de rechazo de tus lentillas, te recomendamos pedir cita previa para que uno de los profesionales que conforman el equipo de +Visión pueda asesorarte y orientarte para dar con las mejores lentillas para ti y te aconseje en su uso y mantenimiento. Y si ya las utilizas con normalidad, te informamos de que puedes pedirlas aquí.