¿Qué es el ojo seco y cómo aliviarlo?

El ojo seco es una molestia común cuando las lágrimas no lubrican bien los ojos. Pero va más allá de “no tener lágrima”. Puede afectar a la superficie ocular, produce problemas visuales, molestias e incluso puede llegar a producir alguna lesión.

0

El 30% de la gente padece ojo seco, y aumenta a más del 60% a partir de los 45 años.

Los síntomas más comunes del ojo seco son enrojecimiento, picor o ardor en los ojos o sensación de arenilla. También puede producir sensibilidad a la luz, fatiga visual e inflamación.

Hay varias causas y tipos de ojo seco, y según cuál sea, varía el grado de severidad y la manera de afrontarlo. Incluso pueden darse varias de estas causas. Estas incluyen la edad, los tratamientos con fármacos, factores ambientales, déficit de vitaminas, enfermedades autoinmunes…entre otras.

Los distintos tipos de ojo seco incluyen el ojo seco acuodeficiente por la disminución de la producción de lágrima, ojo seco evaporativo, por la evaporación rápida de la lágrima, el ojo seco inflamatorio, debido a la inflamación, y el neurotrófico y neuropático, causados por un déficit o alteración en la inervación de la córnea.

Según el tipo de ojo seco, se pueden aliviar muchísimo los síntomas siguiendo unas buenas pautas de salud visual como por ejemplo:
1. Limitar el tiempo de exposición a las pantallas digitales.
2. Pestañear y cerrar los ojos a menudo
3. Combinar gafas y lentes de contacto para darle descanso a los ojos.
4. Lubricar los ojos con lágrimas artificiales.

¿Cuánto hace que no te haces una revisión visual? Si tienes dudas o quieres que te hagamos un chequeo de los ojos, ¡pide cita!