Gafas bifocales o progresivas: Principales diferencias

Cuando hablamos de visión, hay que tener en cuenta la edad. A los 45 años se puede manifestar lo que se conoce como presbicia o vista cansada. Si además se añade alguna otra alteración, la solución óptima son las gafas bifocales o las gafas progresivas. En este post te hablamos de ambos tipos de gafas y de sus diferencias.

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Cristales bifocales 

Son cristales que combinan dos graduaciones diferentes; para la visión de cerca y de lejos. Se caracterizan por tener de manera clara y diferenciada dos áreas o campos visuales; en la parte superior está la graduación para ver de lejos, y en la parte inferior, la que corrige la visión de cerca. Hace años, la marca que dividía ambas áreas estaba muy marcada, pero actualmente es mucho más sutil. 

Pese a las mejoras gracias a la tecnología, lo cierto es que los cristales bifocales cada vez se usan menos, ya que a muchas personas no les gusta esta división y no les resultan cómodos al no haber una zona central intermedia. 

Otra de las razones principales por las que cada vez se demandan menos, es porque resultan incómodos para el uso de ordenadores. 

Cristales progresivos 

Los cristales progresivos, también conocidos como multifocales, han sido una revolución en el mundo de la visión. Al igual que las bifocales, corrigen diferentes alteraciones con diferentes graduaciones en una misma lente, pero abarcando campos de visión más amplios. 

Estas son sus principales ventajas: 

  • Visión intermedia: Además de poder ver bien de lejos y de cerca, las gafas progresivas ofrecen un área de visión intermedia, distancia a la que suele estar situada la pantalla del ordenador. 

  • Cambio de graduación natural: Los cristales bifocales presentan un salto brusco entre una graduación y otra, mientras que, con los progresivos, el paso entre graduaciones es mucho más progresivo, lo que permite al ojo mirar a diferentes distancias e ir adaptándose sin mareos y sensación de incomodidad. 

  • Visión panorámica: Los cristales progresivos ofrecen una mayor calidad de visión al enfocar los objetos más lejanos y la posibilidad de abarcar una zona más amplia al enfocar de cerca. 

  • Menor tiempo de adaptación: En la actualidad estos cristales ya no requieren tanto tiempo de adaptación como hace unos años; están tratados para que en un periodo breve puedan usarse con normalidad sin distorsiones ni mareos. 

Principales diferencias entre gafas bifocales y progresivas

 

Presbicia o vista cansada 

Como decíamos, a partir de los 45 años es muy probable que empieces a notar algunos síntomas de vista cansada, ya que afecta al 90% de las personas de esta edad. Se trata de una alteración visual ligada al envejecimiento de los ojos que, antes o después, acaba afectando a todo el mundo. 

Si nunca has necesitado gafas, simplemente con unas gafas que te ayuden a leer, escribir, o a realizar cualquier tarea que requiera fijar la vista, es suficiente. 

Sin embargo, si ya llevas gafas para corregir alguna otra alteración como miopía o hipermetropía, significa que hasta el momento habrás usado gafas monofocales con una única graduación. Al sumarse la presbicia a tu alteración previa, deberás optar por gafas bifocales o progresivas para corregir tu visión. 

Para escoger entre cristales bifocales y multifocales necesitas el mejor asesoramiento, por eso te animamos a que te acerques a una óptica +Visión para que un miembro de nuestro equipo de ópticos-optometristas te informe y evalúe tu caso particular. Si lo prefieres, puedes pedir cita online aquí

 

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